miércoles, diciembre 28, 2005

Si me amotino entre tus sábanas no es por que me enamoré de su perfume.
Solo estoy montando una batalla cuerpo a cuerpo contra el paso del tiempo.
Yo no quiero envejecer. Y menos que menos arrugarme.
Si me enrriedo entre tus piernas y tus brazos, y tu lengua me embalsama, quien dice me conserve intacta por siempre.

Brillar y brillar, solo por tus besos.
Sin ataud ni velatorio, ni coronas de flores, ni lágrimas ajenas.
Solo besos hasta el fin.

martes, diciembre 27, 2005

Mi casa no se recicla

Esta bien, son docientas cuarenta y cuatro entradas a un blog nacido en julio.
Y no esta nada mal.
De pronto parece que se disipó la angustia que empañaba el paisaje. Ahora podemos dejar fotos de artistas y hasta me animo a mostrar mis manos pálidas detras de un cartón viejo, envase de una ducha vaginal que se refugió durante años en la parte alta del ropero de mis padres.

Mi amiga dice que en mi casa se puede encontrar de todo. Y no es que sea el bolso de Mary Poppins, pero es algo parecido.
Mi padre se niega con un ímpetu casi opresivo a dejarle paso a los avanses tecnológicos. En mi casa por ejemplo llego el televisor a control remoto cuando las demás familias ya compraban estos inteligentísimos soportes de TV para amurar a la pared.
No tenemos ni video ni equipo de música. Y la computadora me costo años de súplica y hasta un: -Sin computadora, no sé si puedo seguir estudiando...no puedo seguir vagando de casa en casa en busca de una pc.
Claro que poder tener internet me costará un trabajo bien pago.
El DVD es para mi papá algo así como la sigla FBI para un prófugo.
Mi infancia esta filmada en super ocho, lo que implica la condición necesaria de por lo menos tres interesados expectadores. Montar el micro cine no es una operación que se pueda hacer a cada rato. Alguien tiene que apagar la luz cuando mi papá lo diga y hay que olvidarse de usar la heladera por un rato largo, ya que proporciona la superficie blanca sobre la cual se proyecta la imagen.
Ahí estoy yo. Sentadita en una sillita de esas altas a la cabeza de la mesa, lugar que me apoderé por el resto de mi existencia en esta casa. Tengo una una cabellera rulosa bastante prominente y hablo no sé que cosa sobre un accidente automovilístico que escuché en el noticiero, algo así como: -a tutu a mató
De fondo la heladera de esas Siam con manija de metal; y toda esta tierna imagen proyectada sobre una un poco más nueva que mi padre se digno a comprar después de que se quemara el motor de la Siam.
Por mi barrio todavia pasa el afilador de cuchillos y el vendedor de ajos, el huevero y la verdulería ambulante.
Y cuando es la temporada se escucha: -a la saandiaaa la saaandiaa!!!

Para mi el tango sale de la radio revestidita en cuero que mi papá colgaba de cualquier clavo en la pared mientas limpiaba jaulitas, arreglaba algún elemento inarreglable. Para mi el tango se tararea, o se silva, como hace el diariero, o como mi papá. El tango no se baila, el tango es para que se quede en mi quincho chatarrero, humedeciendome una infancia de vueltas en triciclo alrededor de la flor china.




miércoles, diciembre 21, 2005

miércoles, diciembre 14, 2005

mal día

En un momento pensé que el blog había desaparecido.
"Página no encontrada. Página no encontrada".

Anoche soñé que la otra Pulpita había publicado dos entradas en el blog que me dijo que abrió para probar.

Hoy me di cuenta de que el mundo es muy hostil: los colectivos hacen mucho ruido; hay gente con uniformes negros que lleva revólveres en la cintura y el tubito por donde saldría la bala apunta al piso a veces y otras a mis pies. Por pedir cariño, amor, abrazos, atención te dicen caprichosa, egoísta e hija única, todo junto. La gente no te da tiempo a que les des las gracias o le pidas disculpas. Tranquilo, un minuto no quiere decir que nos colguemos. Que nos colguemos significa que te pusiste re loco porque te cagaste. Porque la vida te asustó tanto que te hiciste caca encima y te pusiste a drogar. Ni porque sos rockero, ni porque sos un loco, ni porque sos un pobre pibe salido de la villa.

A mí, no saber qué carajo hacer con mi tiempo y mi mañana me aterra. Si los hombres no saben contener, de algo me tengo que agarrar para cuando este mundo hostil me quiera pasar por encima. Yo tengo que saber qué hacer. Algo, como saber usar el martillo; no sé. ¿Pedir ayuda? Ni en pedo.

Y no tiene sentido no tener ganas de coger porque estás nervioso por un examen o porque tenés que cerrar notas.
Bueno sí, vale. Vale si conquistamos el mundo.

martes, diciembre 13, 2005

me ahorco con la sábana

de lo único que sé hablar es de lo que me gusta y de lo que quiero.
lo que no me gusta, lo puteo, pero no siempre puedo fundamentar.
me decís navidad y yo digo lapiiiiiiiiquetepppiiiiiiixxxx.

estoy deprimida y angustiada porque no puedo hacer pasado del pasado y cuando pienso en mañana me quiero ahorcar con la sábana. encima puedo llorar solo cuando escucho "no distance left to run" de blur en la parte que albram dice desalmadito: "it´s over, i hope you find someone who makes you feel safe in your sleeping tonight. i want to kill myself trying to stay in your life."

y necesito abrazo, abazo, abuaaaah.

esta noche llevé a mi abuela al colón. como nieta que pretende terminar -antes que empezar- una carrera universitaria me parece que es mi deber llevarla a ella que trabajó más de treinta años en un fábrica cosiendo corpiños Peter Pan. Mi abuela de 6 a 16 en la maquinita -como su nieta, pero lo mía tiene colores y hay blogs y gente común que cree que escribe cosas locas- con luz artifical. Pobre, en el Colón se sentía sapo de otro pozo y no lo podía disimular. Lo que me gusta de mi abuela es que en su contracción muscular, en su silencio e insensiblidad me reconozco. Además le hago cualquier capricho y no cuestiona. Se lo guarda todo. Pobre.
Yo, que nunca vi cosas tan glamorosas como el Titanic y el Colón, sí lo pude disimular. Me puse una chalina bordó, un vestidito negro al cuerpo con volados y mis nuevas zanadalias de taco excelente, baratas y de raso que no me hacen doler nada y caminar ligero como una lady.

La cuestión es que yo con mi abuela y sus manos de costurera hacían un ruido húmedo. Mi abuela no sabe aplaudir, no sabe felicitar, ni abrazar, ni dar besos.

-Qué emocionante, no abue?
- Se.
- Lloraste? Te emocionaste?
- (cara de "What????")

domingo, diciembre 11, 2005

A TONO

Disfrazate vos

A mí me gustan y me inspiran los franceses ilustrados sensibles y pesimistas que condensan todos los males de la humanidad y de la realidad humana en la ponderada problemática de la Literatura. Desde los estructuralistas, los existencialistas, los post estructuralistas, los que no aceptan rótulos. Todos. Que se preguntan lo mismo de siempre -el ser, el tiempo, el lenguaje, el pensamiento, las emociones, la utopía- sin esperar respuestas. Escriben de un mundo distinto del que viven y transitan, y sin embargo escriben. Escribir es pensar, escribir es hacer. Y ahí el problema. Con esa visión fatalista, inútil, poco práctica, ¿cómo hacen para hacer? ¿Y si dormimos, en vez de disfrazarnos de cualquier cosa inútil, perdida de antemano, en este tiempo y espacio que hay entre la luz pre natal y la luz post mortem?

Están los que dejan que la mano invisible les ponga el traje y se acomodan con facilidad; otros rezan; algunos cantan. Todos eligen. Mis ilustraditos, escriben. En ese momento crean la sensación en la que quieren permanecer, el mundo en el que quieren vivir y el que quieren transitar, y por eso tanta parolata en homenaje reflexivo a la Literatura. Pero cómo hacen para hacer con esa mirada aguda, incómoda y sensible. Para levantarse temprano y vestirse y escuchar y salir y volver para escribir y que sus libros se multipliquen una vez muertos y las tapas opacas y no brillosas como los libros del merchandising.
¿Cómo se hace en la tristeza? Esta pregunta plantea una división en el grupo de los que no se comen el versito. Una división que suele aparecer, erróneamente, como las dos caras de una misma moneda, con orgullo de limados. Por un lado están los artistas y por el otro, los locos. El artista es aquel que puede canalizar lo que le pasa y por eso hace. Las emociones le pasan quieto, en la misma posición le sucede un viaje. Y siempre está ocupado: encerrado en el taller o mirando diez horas seguidas la pantalla de la computadora. El loco, en cambio, es aquel que se deja ir, al que como todo lo es difícil, no puede, y por eso, no le pone límites al deseo, a la ira, a la angustia y al no enfrentar el miedo, se deja chupar por la fuerza de gravedad. Y loco te volviste, cuando una vez en el piso, te das cuenta de que la infelicidad se te encarnó.
¿Y si nunca puedo parar de comer?

Ahora, por mi balcón veo volar todas juntas las palomas. Veo la sombra proyectada en el reflejo de la copa de los árboles. Mis vecinos gritaron "Gol, hijos de puta!!". No tengo idea qué está pasando. Me levanté estornudando y con dolor de cabeza. Bajé a la cocina y tenía frío. Mi abuela nos cocinó a mi papá y a mí unas milanesas napolitanas. Estaban muy ricas, pero mi papá come muy despacio. No levanté la mesa y subí a estudiar al balcón. Me dije en una típica actitud "con esto no puedo": "Saussure dejá de inventar" y me dormí. Me desperté un poco más bronceada y me tiré a la cama a dormir una siesta con culpa. Soñé que me bochaban. Me levanté y me fui al bar. No tenía plata así que les pagué con un ticket restaurant de 9 pesos.

- Mozo, hágame un ticket o fíeme que mañana le pago.
- No, puedo hacer eso, pero por ser vos, te vamos a dar el vuelto.

La cuestión es que el mozo no tenía cambio, así que me dio un ticket de un desconocido, pero una persona al fin. Si hay algo impersonal en el mundo es el billete, es de pocos y de todos. Ahora tengo uno de un hombre cuyas iniciales son GAG que trabaja en CROCE HNOS AG.MARIT S.R.L. Me dio miedo, tengo miedo, como si en ese estanciero de 5 pesos guardara una historia ajena en mi billetera. ¿Y si es un tipo mufa y me trae mala suerte? Igual, me parece que es un tipo bueno, porque el ticket es de noviembre y le restan 14 más para terminar la chequera. Es decir que es un tipo que ahorra, y los tipos que ahorran son buenos porque son miedosos.

viernes, diciembre 09, 2005

Tertulia

Una mesa de madera bastante gorda y cálida. Tiene cuatro lados, y nosotras somos cinco mujeres y un niño.
Hay tres sillas y una reposera. No hay mantel ni delivery, ni nada que sugiera que vamos a cenar.
Una de las mujeres tiene seis años. El niño uno.
La madre de la de seis trabaja vendiendo empanadas, otra es mi hermana y es la madre del niño de uno, que en este momento esta metiendo la mano en el plato de Hipina, la perra. Todas, menos la de seis y yo, están gritando y corriendo hacia él. Pero la que más grita es mi hermana.
Sigo, la que vende las empanadas es la madre de la de seis, la dueña de la perra y de la mesa. Y esta embarazadísima. Adentro de ella hay otra mujer. Pero no podría definir su edad. Creo que si lo hago el comité de mujeres a favor del aborto me insultaría y se sentirían ofendidas.

Ahora si que vamos a cenar ya hay platos y hay botellas. Mi plato es el más lindo, no, mas lindo es el de la seis, sin que se de cuenta, se lo cambio, ahora sí.
Rudy, el único hombre que vive en esta casa, se fue. Cuando llegue, estaba tocando el órgano y escuche que cantaba bastante bajito, aunque no sé si es que pensaba, porque la madre de la de seis me dijo que él piensa en vos alta. Y que entonces ella se entera de lo que él piensa de ella sin necesidad de preguntarle nada. Él no sabe que hace eso, solo lo hace. Pero ahora no esta, se fue para que comamos todas juntas y charlemos cosas de chicas.
Yo opino que contemos chismes, supongo que es lo normal entre mujeres y me siento contenta de pedir una normalidad. Entonces se dicen algunas cosas sobre alguien que no esta, sobre su novia, sobre la ropa de su novia y sobre los padres de la novia, y también sobre sus tetas. Yo me como dos empanadas, una de choclo y otra de queso, tomate y albahaca. Y la de seis me corrige:
-Se llama caprese.
-No, se llama queso, tomate y albahaca.
-No, se llama caprese.
- ¿A sí?, ¿y qué es el caprese?
- No sé.
- Viste, gane yo, caprese no es nada.

Pronto nos vamos a tener que ir. Ya casi no se charla, y el de uno esta empezando a llorar y a reírse mucho, y eso lo hace cuando tiene sueño, y quiere que la reunión se termine.
Pero antes la que hasta ahora no nombre, pero está sentada a mi lado, le pregunta a la de seis por su amiga la vecina:
-No, no viene más, ya estaba harta
-Si, se come las empanadas
-Y cuando viene se queda dos o tres días, se cruza por la terraza, como se comunican…
-Una vez jugamos con los kinders y cuando se fue, se llevo los bolsillos llenos
-Yo no creo que sea cleptómana.
-No, es muy chiquita
-¡¿Y sabes la mentira que me dijo uan vez?! Que el abuelo trabajaba en coca cola!!

No hay mucho más por hacer, levantar los platos, guardar las empanadas que sobraron para ser vendidas luego, lavar algunos vasos y esperar que Rudy vuelva con el auto para llevarnos cada una a su casa.
Yo vivo bastante cerca, solo tengo que cruzar la placita de Rauch, pasar la cuadra de árboles grandes y doblar, en esa cuadra ya se asoma mi casa casi al final.
Pero igual pido que me lleven en auto.
Hace frío, estoy cansada y la de seis me contó un cuento horrible de un hombre al que le cortaban la lengua.
Ni loca camino sola hastas horas.

Felíz navidad

Mientras mi madre mira un documental sobre la araña azul de Venezuela, yo armo el arbolito.
Ella, recalca: -¿ese es todo el espíritu navideño que tenés?

Parece que la distribución de lucecitas de colores alrededor de las fotos familiares, es demasiado parecido a un altar casero del Distrito Federal.
Si, mi decoración es decididamente bizarra.
Y peor cuando mi madre elige un camino al crochet blanco para poner debajo del pino. Argumenta que es la nieve.
Las luces de colores, los cuadros de fotos familiares colgando de la pared revestida en machimbre de fondo, el pino con el pie nevado, es lo peor de la decadencia navideña.
Si esto no es espíritu navideño, el espíritu navideño no existe.

De ahora en más solo resta esperar y rogar que Toto no se suba a la alfombra enrollada al borde del tocadiscos sobre el que se monta la estructura festiva.
El podría muy ágilmente estirar sus pequeñas manitos y tirar de la ramita que más cuelga.
El vegetal artificial caería sobre su pequeño cuerpo y con él toda mi escenografía mejicana.

jueves, diciembre 08, 2005

Haaaaarrrtaaaaa

Olvídense de que los respete. Olvídense de que los trate y bien y los escuche.
Olvídense de la chica que hacia todo lo que le pedían, olvídense, me convertí en una irresponsable, y esta irresponsabilidad es lo que mejor sienta desde hacia muchiiiisimo tiempo.
Me canse de responder mail, me canse de ser atenta, me canse de tratar bien y de soportar. Me canse de pensar en mañana y por eso padecer hoy. Me canse, todo este tiempo les mentí, no era yo. Yo soy mala, yo me cago en ustedes. No me importan sus sentimientos ni sus obligaciones, no quiero ayudar, no quiero atender el teléfono nunca más. Y si suena infinitas veces, infinitas veces lo voy a dejar sonar. Y si me quieren, los voy a tratar mal, y si me odian peor.
No me vengan ni con besos ni con regalos porque ya nada me convence.

¿Y sí me voy lejos y ya no me encuentran? ¿Y si empiezo de nuevo lejos de todos? ¿Si me compro otro pasado y me zambullo en el agujerito de la puerta y cuando salgo soy una nueva? me hago toda de nuevo.
Sin estos padres, sin este tipo, sin estas personas que me circundan, todo de nuevo.

Quiero exorcizarme de todo esto que me no quiero hacer y que hago porque otros me convencen que es lo copado. Quiero exorcizar mi cuerpo de esta ropa y desnudarme.
No creo en todo lo que digo que creo, creo en la mitad de lo que afirmo diariamente.
Y renuncio. Renuncio a todo. A todo a todo.
No creo en la filosofía, no creo en las letras, no creo en los diarios menos que menos, no creo en los hombres y menos en las mujeres. Y no me importa no creer.
Creo en la plata, quiero tener plata, quiero aburguesar mi alma y comprarme la felicidad, la eternidad, la belleza. Todo esto se compra, y que no me vengan con estupideces. Quiero plata, sí, quiero el vil metal entre mis manos y ya verán como se me va la angustia enseguidita, como me dejo convencer por el mundo en un instante, denme unos cuantos billetitos verdes y les compro todo lo que me quieran vender. Todo todo, les compro sus universidades privadas, les compro la propagandita de la joven linda y exitosa, le compro el cuentito de la respiración y las pateaditas para liberar la angustia, les compro todoo, los bolichitos para drogaditos consentidos y estupidizados, les compro extensiones, me tiño de rubia y este verano me voy a punta.

miércoles, diciembre 07, 2005

Transpirada

Parece orgullosa de su nombre "no yo soy Noé-lia" y dejo caer el labio inferior acompañándolo con una leve inclinación de la cabeza hacia adelante, las cejas como dos arco iris enmarcaban esa cara gorda y sudorosa.

Que detestable, que patético orgullo despilfarran. Libretita negra en mano, o en su defecto la celeste de cartón, para los que todavía no hicieron el trámite.
Una pequeña multitud amontonada en la puerta del aula 154 listos para estirar la manito, entregar la libreta y esperar la Nota.
Una rubia que no soporto y que seguramente tampoco me soporta, una tonta-linda-hijadeunembajador-engreída, un alto-anteojudo, uno que frecuenta El Salón Pueyrredón con intención de chuparse toda la pulpita , esos que no puedo definirlos porque ni ellos saben lo que son, y los acneáticos, especímenes amigables pero con demasiada pus en sus mejillas.
Me senté, a esperar que mi apellido se aventure en este murmullo vacío y saqué el librito.
De a ratos levante la vista para corroborar que no estuviese demasiado abstraída como para no escuchar mi nombre. Y ahí aparecia ella, gorda gotas de sudor, capitana de los esperadores de nota. Charla que te charla con cuanto imbécil se le cruzara.

Mi libro me defendío de ellos y en cuanto uno parecía querer acercarse, yo me reclinaba más concentrada, mas interesada, mas insoportablemente impenetrable, en mi lectura mañanera.
Estoy casi segura de que este final del ciclo académico es lo mejor que me pasó en el año.

martes, diciembre 06, 2005

Hay canciones por las que vale la pena deprimirse e inventar historias de desamor para llorar.

Quiero ser virgencita otra vez.
No tengo madre y ya estoy grande.
Perdí mi reloj con corazón que dice "I love you".
Puedo contar con los dedos de la mano las personas que me importan y con los dedos del pie, los grupos humanos que me interesaría que vivieran 50 años más. No más.
No me gustan los viejos, los que hacen rehabilitación, los que se aprovechan de los enfermos y la piel de las mujeres de treinta. Tampoco los que empezaron a fumar para hacerse los grandes y ahora se les hizo un hábito.
Los punks fuman? No, porque no quieren crecer.
Yo no tomo porque no me quiero divertir. Pero puedo acabar más rápido que el tiempo que me lleva almorzar.
Soy una chica seria con graaannndes responsabilidades (¿o responsabilidades de grandes?)

Quiero ver el mar.

la encontré

It’s over
You don’t need to tell me
I hope you’re with someone who makes you
Feel safe in your sleeping tonight
I won’t kill myself, trying to stay in your life
I got no distance left to run

When you see me
Please turn your back and walk away
I don’t want to see you
Cos I know the dreams that you keep is wearing me
When your coming down, think of me here
I got no distance left to run

It’s over, I knew it would end this way
I hope you’re with someone who makes you feel
That this life is the night
And it settles down, stays around
Spends more time with you
I got no distance left to run

lunes, diciembre 05, 2005

mamita querida

Quería que yo le peguntara por la reunión de ex-alumnos a la que acudió el sábado a la noche.
Mientras se afeitaba se acercó hasta la puerta de la habitación, pero no muy cerca, desde el centro del living, justo en el medio de la alfombra rosa-sucia-horrible, me dijo: -ves como sos?, ni me preguntas como me fue, qué sentí, cómo estaban mis compañeros, nada, te das cuenta?.
A lo que yo respondí: -... sí.... si me contaste que uno era historiador y otro profesor de psicología y que cuando le dijiste que yo estudiaba filosofía te dijo. "esos son los que van a cambiar el mundo", y que te pareció que estaba loco, si pa, si me contaste.
-no, yo no te conté todo eso, te lo habrá contado tu madre.

Y sí, me lo había contado mi madre. Es que su voz ya se convirtió en la voz de la familia, todos expresamos por su boca. Ella dice.
Ella cuenta. Se apura, viene casi corriendo, entonces cuando ve que me estoy despertando, se mete en la habitación, se sienta en la cama y escupe toda la nueva info.
Yo trato de entender de que se trata todo este repertórico-amanecer.
Pero no hay caso.
Así, la distancia entre el y yo es siempre la misma.

domingo, diciembre 04, 2005

Contra todos

Odio a Pergolini que se hace el punk y despues se casa por iglesia.

Odio a los que se preocupan por los blog ajenos solo por que ellos escriben en páginas super exitosas, de calibre literario, de ambiente Nacional Buenos Aires.
Los odio, los escupo, hoy odio a los hombre que creen saber más.

Y si quieren que "negocie",los escupo de nuevo, por que mi blog no es un foro, ni tampoco el semanario de púan, mi blog es la mierda que no te digo en la cara porque me la guardo, mi blog es el terror que le tengo a todo lo que se extiende fuera de mi casita, mi blog es mi vómito sin filtrar, es mi orgasmo a escondidas cuando tenia siete años, mi blog no repite lo que ya sabes, ni lo queres escuchar, mi blog es la mufa a los blog como esos.

sábado, diciembre 03, 2005

Mis preguntas no pasan del ¿te gusta? o ¿qué onda? Lo otro, lo pregunto con miedo.
Mis comentarios no van más allá de la descripción estética.

Esto es para vos Carolino:
But we went on whole hearted it ended bad
But I love what we started it says stop
But we went on whole hearted it ended bad
But I love what we started

Te amo chuli.
No te lo digo por miedo a que te vuelva a confundir.

viernes, diciembre 02, 2005

No dar las gracias. No esperar que nadie actúe como uno.
Y si es necesario, romper ventanas.

Cinthia Filkenstein. Treintañera. Usa colores pasteles y tiene tetas de silicona, pero no -orque parece religiosa- pero sí porque es muy flaca. No tiene panza. Cuando estudiaba en Tea le ofrecieron ser la recepcionista de la nueva productora Cuatro Cabezas. Pasó por todos los puestos, dijo. Ahora maneja la prensa de la empresa y a veces hasta se encarga de decirle cómo tienen que hacer las notas a los periodistas. Le importa más cuidar la imagen del medio en donde trabaja que a sus dueños.
"Mirá que Mario hoy está de re mal humor."
Seguro que también sabe a qué temperatura su jefecito re copado de ojos azules toma la coca cola.
Aparece Mario, entra hablando con su asistente de primera y con un banquito en la mano.
"Ay qué divino! Se vino con el banquito de madera en la mano!"
Ay nena, qué suerte que tenés un jefe caballero que no te hace cargar un banquito de madera que te puede arruinar las uñas recién esculpidas. No, no se las esculpe porque parece una monjita que usa anillitos y cadenitas de oro, que no sale de su casa sin plancharse el pelo y sin combinar la cartera con los zapatos. Y esas se liman, se pintan ellas, pero nunca van a esculpirse las uñas.
"Ay Mario! Esa cara te la vi en un montón de fotos!"
Si querida, menos mal que pone esa cara de comic, sino cómo salvamos la cara de pelotudo de ese que tenés de jefe. Sábés que esta foto también es un favorcito para tu empresita de la que te sentís tan orgullosa, y tu jefe copado es de este punto · a este otro punto · de estrechito.
"Sí de chiquito me la cortaron, quieren ver?"
Sï, dale seguí contando chistes de sexo al mejor estilo Tinelli. A ver cómo juega tu pija a la guerra del Paraguay?
El fotógrafo quizo cambiar el lente y Mario se levantó y se fue. Ok. Si querés fotos de cinco minutos, it´s not our fault.
Y si te fue bien -hiciste lo que quisiste y encima plata- eso no te da derecho a hacerte la canchera. Porque vos, que decís que podrías ponerte una agencia, pero no lo hacés es porque no te animás a la independencia y te es más cómodo vivir tu vida, de segunda de alguien.

Tenés novio?
Te sabe coger?
Es alto?
Todavía vivís con tu mamá? No te alcanza el sueldo o la querés demasiado a tu mami que no te podés separar?

"Cuando yo empecé a trabajar con los chicos era un sueño estar con ellos. Me mandé igual. Y acá estoy. Cumplí mi sueño. Sí, estudié en Tea, me llevé política internacional con (Luis) Bilbao por comer chizitos. Bah, él me acusó de hablar y yo le respondí que cuando como no hablo porque soy educada. Y me mandó afuera de la clase. Tan mal no me fue. ¿Sabés que número de legajo tengo en la empresa? El número 3. Ahora somos como mil."

Cinthia, que se cree rebelde y contestataria, porque obbbbbvvvvvvio, trabaja en Cuatro Cabezas, y que se pone la camiseta de su empresa y por eso habla de nosotros, porque encima son un grupo, seguro que es una constipadita. Dicen que los chizitos te tapan. Y no sólo el intestino.

Limpitas