miércoles, diciembre 28, 2005

Si me amotino entre tus sábanas no es por que me enamoré de su perfume.
Solo estoy montando una batalla cuerpo a cuerpo contra el paso del tiempo.
Yo no quiero envejecer. Y menos que menos arrugarme.
Si me enrriedo entre tus piernas y tus brazos, y tu lengua me embalsama, quien dice me conserve intacta por siempre.

Brillar y brillar, solo por tus besos.
Sin ataud ni velatorio, ni coronas de flores, ni lágrimas ajenas.
Solo besos hasta el fin.

No hay comentarios.: