sábado, abril 08, 2006

Tranquila, vas con OB

Cuando me indispongo siento unas ganas constantes de estar sentada en el inodoro.
Aunque no haga más que estar así, quieta, o retorcida.
Solo tengo que estar ahí, sentada.
Como si el bebé que no se concibió hubiese dejado su espíritu en mi útero y ahora quisiera salir.
Necesito que mi vagina este bastante cómoda y abierta, que sienta que puede expulsar lo que quiera.
Con un precipicio debajo de ella.
El inodoro es el mejor precipicio que conseguí hasta ahora.

Esta es la atmósfera de hoy, un pequeño y cuadrado baño amarillo.
Cierro la puerta y tapo el agujerito de la cerradura con la yema de mi dedo índice.
No quiero que entre nada.
Que el aire de afuera se quede afuera. Que lo que pertenece al otro lado, se quede del otro lado.
Y me quedo así. Como recostada en mis rodillas. A punto de caer, pero no. Pensando en la virgen María, en si ella sentiria estas contracciones.
Y entonces me acuerdo que no creo en la virgen maría. Pero igual le pido que me calme.

Estoy indisponiéndome y no compre toallitas. Si no compro, se ensangrientan mis piernas y mi bombacha. Después la mancha de sangre es imposible de sacar.
Y escribir se convierte en una intimidad puramente vaginal. Una contracción uterina, una puntada desde el borde externo de mi concha que pasa por las trompas hasta legar a los ovarios.
Un calambre que me despega del suelo y me aleja del tiempo.
Los sonidos se vuelven más estridentes. Los agudos más agudos y los graves más graves.

No hay nada mejor en estos casos que un Ibo Evanol. Rápida acción.


Cuando me acorde que podía venirme ya era de noche y había decidido dormir con mi ex para recordar otros tiempos.
En la calle Brasil había un kiosco todavía abierto. Me compré dos actrones y un paquete de diez toallitas.

Toallitas femeninas.

6 comentarios:

Pulpita dijo...

amiga, cada vez canalizas con mayor talento tu dolor.
me encantó.

Anónimo dijo...

Ya pensó que va a hacer cuando venga la retirada?
Ya tiene un nuevo dolor que quiera ser la puta de sus letras?
Es cierto... mientras tanto solo me basta saber que va a menstruar otra vez. Y a ud tambien.

Anónimo dijo...

eso es muy bueno niña...muy bueno

Pulpita dijo...

Cuando me llegue la retirada… bueno supongo que se refiere a cuando deje de menstruar, a cuando me llegue la menopausia…
Para entonces pienso tendré más o menos 50 años y seguramente ya tendré mejores cosas que hacer que escribir, y en el caso de escribir seguramente mi tono sonará más interesante.
Pero usted ya no estará para leerme. Ni este blog para ser escrito.
Para entonces quizá usted y yo ya nos hayamos cruzado un par de veces por la calle o en algún cumpleaños de algún primo soltero, y es probable que usted me haya agradado. Y yo a usted.
Para entonces tal vez pueda escribir acerca de sus talentos amatorios. O de sus defectos. Y juntos nos demos la retirada. Sin dolor claro. Sin llanto. Sin retorcijones. Como a usted le gusta

¿La puta de mis letras?:
Yo, mi vagina, mi menstruación, mi futura menopausia, su erección nocturna
¿O usted cree que lo que lo mantiene en vela leyendo esta clase de blogs es una curiosidad picarona sedienta de “nuevas letras”?

Juan Manuel Bruñol Silvani dijo...

Todo tipo de sed impulsa las jornadas de lectura.
Aún no sé cual genera usted.

juan gris

Anónimo dijo...

I really enjoyed looking at your site, I found it very helpful indeed, keep up the good work.
»