domingo, junio 11, 2006

El sur de la acción

La muerte espontánea de cualquier persona en el medio de la vereda de una calle de los suburbios, es un tipo de muerte que debilita una parte de la sensibilidad en el espectador que ya no vuelve a recomponerse jamás

Los barrios del sur tienen algo de suicida para el dominguero que decide salir a recorrer sus calles desiertas.
Pasajes que terminan en una pared, sientas de casonas abandonadas, fachadas de 1920, bares en la ruina, vacios, fábricas cerradas desde hace décadas. Gatos miles, perros vagabundos y hambrientos. Ancianas que viven en casas destruidas, sin gas, sin agua, sin electricidad. Locutorios cerrados, y una pueril murga que ensaya en la plaza frente a la estación del tren. Son unos pocos saltarines que estrujan piruetas sobre las baldosas de la plaza de Remedios de Escalada, al lado del monumento al periodista: Una boca enorme, abierta, que grita vaya a saber que cosas y a quien.
El otoño congela en el sur.
Los domingos te enmudecen. Te dejan sin aliento. Y sin ganas de respirar.

Cuando pase con el colectivo por esa esquina de Gerli vi como la policía tapaba un cuerpo con una sabana blanca.
El colectivero dijo:
- uhh!! ¡Pobre viejo! Hoy vi cuando se caía en el medio de la vereda… pensé que solo se había desmayado.

Pensó. Pero no paró el colectivo.





Debilita una parte de la sensibilidad del ser humano que la vuelve inerte, inactiva. Sin reacción.
El sur te petrifica.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

No hay remedios en la escalada final.

Anónimo dijo...

Very pretty design! Keep up the good work. Thanks.
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